Se dice que nuestra forma actual de vida es una de las razones por las que el mundo está cada vez peor. Y es que, si miramos el actual sistema económico y social, nos hemos vuelta una sociedad de consumo. Tomamos, usamos, desechamos y repetimos el ciclo.
Esto ha provocado que el medio ambiente cada vez se vea más afectado, tanto por la extracción de recursos como por la producción y generación de desechos. Afortunadamente, cada vez son más las personas que están haciendo algo por cambiar esta situación, como Jill Redwood.
¿Quién es Jill Redwood?
Nacida en 1954, en Melbourne, Australia, Jill Redwood es la menor de dos hijos de una familia común y corriente, sin participación en la política o en el activismo. Si bien Jill nació en una familia como todas, había una chispa dentro de ella la cual hizo que se acercara al mundo del activismo.
Y es que, desde la escuela secundaria, Jill participaba en todo tipo de protestas como las realizadas en contra de la guerra de Vietnam. Después de graduarse, Jill decidió volverse parte de Amigos por la tierra, una organización enfocada al cuidado del medio ambiente.
En los años 80’s, mientras Jill vivía en Buldah en East Gippsland, sufrió los efectos del consumismo pues un incendio forestal, causado por la tala de árboles, destruyó su casa. Eso la cambió pues después de dicho evento, se unió a un grupo para la recuperación del parque nacional afectado por el fuego.
A pesar del machismo que afectó su trabajo, Jill se volvió líder del grupo. Esto le permitió ahorrar suficiente dinero para construir una cabaña en Goongerah. A continuación, te hablaremos más sobre esta nueva forma de vivir que ha seguido Jill Redwood por más de 30 años.
¿Cómo es la cabaña de Jill Redwood?
Para entender mejor cómo es la cabaña de Jill hemos preparado esta lista.
- La construcción
Una de las primeras características que resalta a la vista sobre la cabaña de Jill es su construcción. Y es que esta tuvo que ser ecológica para adaptarse al estilo de vida de bajo impacto ambiental y cero contacto que vive la escritora.
- Strawbridge, Dick (Autor)
Para ello Jill utilizó únicamente materiales disponibles en la naturaleza. La estructura está hecha con madera reciclada la cual cuenta con una cubierta de argamasa elaborada a partir de barro, paja y cal, la cual ofrece aislamiento impermeable y térmico.
- Calefacción y agua caliente
Tener agua caliente y calefacción es fundamental, sobre todo para el invierno. Si bien hoy en día el calor se genera usando combustibles fósiles o electricidad, Jill decidió adaptar una estufa de leña a su cabaña. Así, el único combustible que necesita está disponible forma natural en su entorno.
Además, si tomamos en cuenta el hecho de que la argamasa que cubre las paredes ofrece aislamiento térmico, la eficiencia energética aumenta. Para los días de calor, la misma argamasa ofrece protección contra el sol, así como las ventanas garantizan la frescura en el interior.
- Electricidad y electrodomésticos
Como mencionamos en un inicio, para Jill este estilo de vida no supone un aislamiento total. Muestra de ello es el hecho de que su cabaña, y la cabaña ecológica que alquila, cuentan con paneles solares ubicados en el techo de la misma.
Según la misma Jill, los paneles solares le dan suficiente energía para usar su computadora, radio y lámparas para iluminar las cabañas. Además, en los días de sol Jill puede llegar a usar electrodomésticos como lavadora o equipo de cocina, aunque claro, eso depende del clima y el sol.
¿Cómo vive Jill Redwood ?
Además de tener una casa ecológica, y una cabaña la cual alquila a ecoturistas, Jill Redwood cuenta con su propio huerto. Según la misma Jill, este huerto es suficiente para alimentarse ya que además de producir vegetales y frutas, también le permite la crianza de animales.
En el huerto de Jill, la escritora produce todo tipo de vegetales y de frutas, cuidando, sobre todo, las temporadas pues aprovecha las lluvias y el clima para su producción. Además, todos sus alimentos son orgánicos por lo que están libres de pesticidas y de fertilizantes químicos altamente dañinos.
De la misma forma, Jill es amante de los animales por lo que su propiedad tiene espacios diseñados para albergar animales. Así, podemos encontrar que Jill tiene caballos, cabras, gansos, gallinas y perros. Así, no solo Jill tiene compañía, también puede obtener alimentos como huevos o leche de sus animales.
Si bien Jill busca producir todo lo que consume, hay alimentos y artículos que no puede cultivar ni criar. Es por eso que, un par de veces al año, la escritora suele visitar el supermercado en busca de aceite de olivo, chocolate, harina, etc. Aunque ella aclara que esta actividad no es su favorita.
Vivir fuera de la sociedad
Un total de 8 años de trabajo y 3 mil dólares, cifra que parece accesible, le costó su plan el cual, lejos de ser un fracaso, sí que ha funcionado. Actualmente Jill lleva más de 30 años viviendo en lo que muchos ambientalistas describirían como el paraíso.
Esto nos demuestra que no es necesario vivir bajo la tutela del consumismo, afectando el medio ambiente y dejando atrás nuestras raíces naturales. Así como Jill Redwood, lo único que necesitas es se creativo para lograr que un estilo de vida ecológico y las comodidades actuales hagan match.
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Ayudaría mucho una publicación similar, pero EN UN DESIERTO. En una zona así, con recursos naturales abundantes, se puede hacer cualquier cosa.
Hay algunas incongruencias. Con sólo u$ 3000 compró el terreno y se hizo la primer casa ? Y los animales, las semillas para plantar…..