¿Te has hecho está pregunta en alguna ocasión? Nosotros sí. Vamos en busca del envase más ecológico, aquél que no degrada el entorno y apenas provoca impacto en el medioambiente. ¿Sabrías decirnos cuál crees que es? Durante este texto obtendrás algunas pistas interesantes.
A medida que nos adentramos en el mundo del envase y packaging nuestra sorpresa puede ir en aumento. No nos hacemos una idea de la cantidad de materiales y elementos dañinos que siguen siendo fabricados en el planeta. Y lo que es peor, muchos de ellos son completos desconocidos para la sociedad.
Hoy haremos un recorrido por algunos de los envases más ecológicos, aunque también los perjudiciales para el entorno, aquellos que incluso resultan nocivos para la salud y sobre los que actualmente pesan normativas para tratar de combatirlos.
Estrategia española de economía circular, 2030
En 2008 se aprobó el borrador de lo que será una de las apuestas más claras y concisas del gobierno por tratar de utilizar adecuadamente los materiales, envases y productos que la sociedad consume.
Este borrador pone el punto de mira en diferentes sectores de la sociedad e industria, promoviendo que el consumo y utilización de los recursos sea lo más responsable y sostenible posible. Aunque el objetivo se ubica en 2030, la actualidad nos demuestra que una buena política como la actual puede dar sus frutos mucho antes.
En Europa las políticas de reciclado han ido evolucionando hasta nuestros días, ya que a lo largo de los últimos 20 años se han ido promoviendo diferentes normativas que, según las condiciones de cada país, se han ido implementando poco a poco en la sociedad.
Si bien es cierto que los envases copan una buena parte de las preocupaciones de los gobiernos y las personas, existen muchos otros elementos que también suponen un reto eliminar. Hablamos de materiales, residuos químicos o toda clase de elementos generados por la industria.
Un reducido porcentaje de todos estos envases y materiales son procesados debidamente y, aunque las normativas se han endurecido notablemente durante la última década, resulta imposible mantener un control sobre su actividad.
El plástico, el enemigo público número uno
El plástico y sus derivados nos han ayudado durante años a realizar determinadas tareas, así como completar muchos de los productos que actualmente seguimos consumiendo y empleando. Sin embargo, su composición es tan práctica como dañina para el entorno.
En el envasado era frecuente comprobar cómo los plásticos seguían siendo el componente clave de todo producto. Pero con el paso de los años y la creación de nuevas leyes, se está intentando aplacar la alta demanda que todavía existe.
Un claro ejemplo es la normativa RD 293/2015 que pretende reducir notablemente la fabricación de las bolsas de plástico que se consumen en la Unión Europea. Con esta medida se busca encontrar alternativas que terminen desbancando al tradicional y dañino material que tanto daño está provocando en el medioambiente.
El envase más ecológico y sostenible
Para encontrar los envases más ecológicos tendremos que mirar hacia los materiales orgánicos, aquellos que poseen las propiedades idóneas para resultar útiles durante su utilización mientras que llegada su hora, se puedan descomponer fácilmente.
Elementos procedentes del papel, con claro componente biodegradable, son aquellos que mejores resultados están ofreciendo a la hora de comprobar sus efectos en la sociedad y el entorno en el que se encuentran.
Si querías conocer el envase más ecológico, tan solo tienes que revisar algunas de las propuestas y alternativas que la industria está lanzando al mercado. Empresas comprometidas con el medioambiente y la comodidad de las personas.
No cabe duda de que nos encontramos en un momento clave donde la contaminación que hemos generado durante todos estos años debe ser revertida con propuestas alternativas mucho más sostenibles.
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