Es cierto, con solo contemplar la imagen del árbol de Júpiter ya dan ganas de contar con uno en el jardín, ¿Verdad? Hoy vamos a hablar de esta maravilla, también llamada lilas de las Indias, donde podrás conocer un poco más sobre su origen. Incluso aprenderemos todo sobre cómo cuidar el árbol de Júpiter, su poda y más, ya que no se trata de un simple elemento más del jardín.
El árbol de Júpiter es uno de los arbustos con flor más bonitos que existen, muestra de ello es el gran interés que poseen los amantes de la jardinería y el buen gusto por incluirlo en sus colecciones y espacios.
Su tronco tiende a mostrar un ligero tono rosado, algo realmente atractivo, incluso en invierno, cuando se queda completamente desprovisto de sus hojas. Y cuando florece, la postal que arroja ante los ojos es espectacular.
Conozcamos de dónde viene el árbol de Júpiter
Para el mundo occidental, el árbol de Júpiter hizo sus primeras apariciones en el siglo XVIII, de la mano de la compañía sueca de las Indias Orientales. En ella, el propio director de la expedición, Magnus Von Lagerstroem, quedó prendado de su belleza. Muestra de ello fue el traslado de un ejemplar desde las Indias hasta el botánico Linneo.
Linneo desconocía este arbusto tan llamativo y en honor a su amigo director que le proporcionó semejante oportunidad de catalogar una nueva especie, lo bautizó como Lagerstroemia índica, aunque a día de hoy le llamemos como Lilas de las Indias o árbol de Júpiter.
Por otra parte, y como era de esperar, esta especie ya contaba con una gran tradición y popularidad en las tierras donde crecía. Mucho antes de ser descubierto por los europeos, las hojas del árbol de Júpiter se utilizaban en Japón y China para ofrendas religiosas.
Se trata de un arbusto que forma parte de las tradiciones y culturas orientales, donde el llamativo color de sus hojas ha servido para infinidad de rituales y celebraciones desde épocas remotas.
Árbol de Júpiter: Cuidados
Si estás pensando en comprar un árbol de Júpiter para incluirlo en tu jardín o te apasiona la naturaleza tanto como a nosotros, recuerda que este arbusto no precisa de una gran dificultad para conseguir que su belleza llegue a mostrarse en flor. Aunque sí paciencia, ya que no es apto para los que desean un arbusto de rápido crecimiento.
Aun así, el puede llegar a alcanzar hasta los 8 metros, cota más que suficiente como para comprender que la espera merece la pena. Su crecimiento es en forma de multitallo, aunque una buena sucesión de podas permitirá que su copa muestre todo su esplendor.
Y es precisamente el objetivo que tenemos que alcanzar, lograr que la copa brote y desarrolle todo su potencial, tanto en vistosidad de sus tonos como en la cantidad de hojas, ramas y flores entremezcladas. Según la época del año, tendremos tonalidades diferentes en sus hojas, pasando de blancas a incluso púrpuras.
Ahora bien, si nos centramos en los cuidados del árbol de Júpiter, es fundamental tener en cuenta una serie de aspectos. Solo así conseguirás tener un ejemplar digno de admiración:
- Necesita luminosidad. El árbol de Júpiter precisa ser colocado en una ubicación luminosa. Su floración requiere de la acción del Sol, por lo que un rincón de semisombra sería el lugar perfecto para conseguir ver brotar sus colores del tronco.
- Suelo ligeramente ácido. No importa si es plantado en medio del suelo del jardín o en una maceta, pero sus características requieren de un sustrato que tienda a ser ligeramente ácido. También precisa de contar con un buen drenaje y cierta humedad en la tierra.
- Riego. Es recomendable regar el árbol unas 4 veces por semana en los meses más cálidos, mientras que en el resto de estaciones bastará con ser regado una vez por semana. Cuanto más profundo sea el riego, mejor. El agua que utilices ha de estar acidificada o desprovista de cal.
- Abonado y fertilizantes. Otro de los cuidados del árbol de Júpiter es emplear un fertilizante específico para plantas ácidas y abonar regularmente entre la primavera y el fin del verano.
Siguiendo estos sencillos consejos y cuidados tendrás todo lo necesario como para conseguir hacer que tu árbol de Júpiter muestre sus colores y formas tan particulares y espectaculares.
Árbol de Júpiter: poda
Para terminar sobre todo lo que necesitas saber, la poda del árbol de Júpiter es el proceso esencial por el que conseguirás obtener unas floraciones y crecimiento increíbles. Antes de nada, la poda es fundamental en edades tempranas.
Si nos centramos en un plano estético, podarlo permitirá que vayamos creando la forma del árbol que más nos interese. Podar las ramas que van creciendo en la parte inferior del arbusto permitirá que éste adquiera una forma arbórea.
Además de permitir eliminar ramas muertas y demás elementos que podrían afectar a su imagen, el consejo para mantenerlo en perfectas condiciones pasa por realizar una poda de mantenimiento a final del invierno y también a final de otoño.
Y ahora que ya sabes cómo se poda un árbol de Júpiter y qué cuidados requiere, ¿Qué te parece si pasamos a la acción incorporándolo a tu jardín? Apuesta por esta maravilla oriental para decorar tus espacios ajardinados y disfruta de la amalgama de colores que ofrecen sus hojas.
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