La pequeña localidad de Nuenen (Holanda) es el lugar donde el arte, la naturaleza y el uso eficiente de la energía crean una maravillosa experiencia para los ciclistas, quienes circulan en medio de patrones inspirados por la pintura ‘La noche estrellada’ de Van Gogh, en un fascinante carril bici solar.
El proyecto Ruta Ciclista de Van Gogh es parte del proyecto de autopistas inteligentes, un esfuerzo para construir carreteras interactivas y sostenibles que captan energía e interactúan con el tráfico.
Fue diseñado por el Studio Roosegaarde, un innovador laboratorio de diseño social, arte, espacio público y tecnología. Daan Roosegaarde, quien ya había utilizado esta tecnología para hacer algunas autopistas más seguras durante la noche, es el artífice de este carril bici de 800 m, que brilla intensamente y de forma fascinante durante la noche, inspirándose en la pintura de Van Gogh ‘La noche estrellada’.
El carril, que fue abierto al público en Eindhoven el pasado 13 de noviembre, y conmemora el 125 aniversario de la muerte del artista Vincent van Gogh. Los patrones de remolinos utilizados en el carril bici fueron inspirados por el pintor holandés, y se ilumina por la noche tanto por la pintura especial que contiene como por las luces LED integradas que son impulsadas por un panel solar cercano que se carga durante el día.
Según su autor, la senda utiliza un método de iluminación que es «más suave a la vista y a la naturaleza que lo rodea», respondiendo a la autosuficiencia de la iluminación. Además, logra iluminarse incluso si las condiciones del clima no han permitido que la pintura foto-lumínica absorba la suficiente energía solar, «es un nuevo sistema total que es autosuficiente y práctico e increíblemente poético», explica Roosegaarde. Además indica que «quería crear un lugar que la gente experimentara de manera especial, la técnica combinada con la experiencia, eso es lo que significa la tecno-poesía para mí».